Si estás viajando por Suiza en tu propio coche y has pagado viñeta para desplazarte por las autopistas, entonces puedes dedicar uno de tus días de vacaciones para visitar Lietchestein, uno de los países más pequeños del mundo.
Maienfeld es un pueblo muy pintoresco y bonito:
Esta es la casa del abuelo:
Este es el edificio del parlamento
Al final del camino se llega al castillo, que es donde vive el príncipe del país (recordemos que Lietchestein tiene monarquía constitucional)
Al ser la residencia real, no se puede entrar a ver el bonito castillo por dentro.
Feldkirch es un pueblo muy interesante, mientras caminas por el pueblo ves torres medievales, murallas defensivas, e incluso un gran castillo para visitar del SXII
La plaza del mercado es un buen lugar para tomar una cerveza, que aquí los precios vuelven a ser asequibles.
Se nos hace de noche en Feldkirch, de modo que buscamos un sitio para dormir muy satisfechos con nuestro día de visitas.
Nosotros hoy salíamos desde el sur de Suiza, por lo que nos pilla de paso el pueblo Maienfeld.
Este pueblo es famoso ya que es donde se ubicaba a Heidi en las novelas de Johanna Spyri (1827-1901)
Este pueblo es famoso ya que es donde se ubicaba a Heidi en las novelas de Johanna Spyri (1827-1901)
Maienfeld es un pueblo muy pintoresco y bonito:
Después de dar un paseo por el pueblo, seguimos conduciendo monte hacia arriba y siguiendo las señales de Heidi-dorf.
Aquí es donde se encuentra una representación de la casa de Heidi, la del abuelo, y los típicos pastos alpinos que veíamos en los dibujos cuando eramos pequeños jaja
Aquí es donde se encuentra una representación de la casa de Heidi, la del abuelo, y los típicos pastos alpinos que veíamos en los dibujos cuando eramos pequeños jaja
Esta es la casa del abuelo:
Después de visitar Heididorf proseguimos nuestro camino, y al cruzar el río Rin, llegamos a al Principado de Lietchestein, uno de los países vecinos de Suiza.
Este microestado no pertenece a la Union Europea, pero tiene un tratado de libre circulación, por lo que no será necesario parar en la aduana. Hay que tener en cuenta que la moneda oficial de este país es el franco suizo, aunque aceptan euros sin problemas.
Principalmente nos centramos en Vaduz que es la capital del país (aunque no hay mucho que ver la verdad)
Se nota que esto es un paraíso fiscal (la piratería moderna) ya que hay muchísimos edificios de bancos y empresas)
Se nota que esto es un paraíso fiscal (la piratería moderna) ya que hay muchísimos edificios de bancos y empresas)
Lo más recomendable de cara al turista es caminar por la calle principal, que es donde se encuentran todas las tiendas y bares.
Desde aquí se puede ir a ver la catedral de Vaduz, que es bonita pero bastante modesta (no me sorprende mucho quizá, porque yo vivo en España que es un país de catedrales;-)
Este es el edificio del parlamento
Si llevas el pasaporte encima y haces colección de sellos, puedes pasar por la oficina de correos para que te pongan un sello.
El mejor plan para hacer en la capital, sin duda es caminar por la calle Haldenweg, que te conduce por un verde camino hasta el castillo de Vaduz.
Es todo hacia arriba por un cómodo sendero con miradores hacia la ciudad (y vistas a medio país jaja)
Al final del camino se llega al castillo, que es donde vive el príncipe del país (recordemos que Lietchestein tiene monarquía constitucional)
Al ser la residencia real, no se puede entrar a ver el bonito castillo por dentro.
Hay que conformarse con verlo desde fuera.
¿Curioso verdad? El príncipe del país vive en un castillo construido en lo alto del pueblo...Esta historia parece sacada de un cuento.
Terminamos nuestras visitas en Vaduz y nos sobraba toda la tarde libre, de modo que decidimos conducir al pueblo medieval Feldkirch.
Este pueblo ya no pertenece a Lietchestein, ¡sino a Austria!
Todo un acierto venir a este pueblo, puesto que teníamos que repostar gasolina, y aqui el combustible costaba 1/3 más barato que en Suiza y que en Lietchestein. Feldkirch es un pueblo muy interesante, mientras caminas por el pueblo ves torres medievales, murallas defensivas, e incluso un gran castillo para visitar del SXII
La plaza del mercado es un buen lugar para tomar una cerveza, que aquí los precios vuelven a ser asequibles.
Se nos hace de noche en Feldkirch, de modo que buscamos un sitio para dormir muy satisfechos con nuestro día de visitas.
¿Quien nos iba a decir que íbamos a haber visitado 3 países en un día? Es lo que mola de viajar sobre la marcha y sin planes :-)
0 comentarios:
Publicar un comentario