primer día en Suiza- Ginebra y castillo de Chillón

Nuestra puerta de entrada a Suiza ha sido por Ginebra, una ciudad cosmopolita que tiene fama por su alta calidad de vida. 

Ginebra (Genève en francés) es la segunda ciudad más poblada del país después de Zúrich.

Nosotros no queríamos dedicar mucho tiempo de nuestro viaje en ver ciudades, somos más de naturaleza, montaña y caminatas, de modo que solo pasamos en Ginebra una mañana. 

Aprovechamos para cambiar dinero de Euros a Francos Suizos (en las inmediaciones de la estación de trenes encontramos las mejores casas de cambio) 

Paseamos por el centro de la ciudad y vimos el famoso Jet d’Eau. Un impresionante chorro de agua de 140 metros, que es el principal símbolo de la ciudad.

El agua alcanza una velocidad de 200km/h al ser propulsada gracias a una gigantesta bomba de agua de 1 Megavatio

No entramos en los típicos sitios como la catedral, ni en el jardín botánico, ni en el jardín ingles...

Preferimos iniciar nuestro road trip justo después de comer, para conocer otro tipo de lugares más interesantes para nosotros.

Consultamos la previsión meteorológica y comprobamos que los siguientes días anunciaban buen tiempo en la zona de Zermatt y peor tiempo en la zona de Berna e Interlaken, con lo cual nos dirigimos rumbo a Zermatt.

Por el camino y a una hora y cuarto conduciendo desde Ginebra, hicimos una parada en el bucólico castillo de Chillon, construido sobre un lago.

Es el monumento más visitado del país.

A nosotros nos gustó mucho el castillo y lo recomendamos sin dudar. El precio por entrar es de 12.50 CHF para un adulto (10.50 estudiante) 

Durante la visita hay mucha información que explica toda la historia del castillo y la historia de sus propietarios, la familia Saboya 

Muy interesante la visita de los calabozos, la cocina, los dormitorios, y la torre de defensa desde la cual hay unas vistas muy bonitas:

Los exteriores del castillo son gratuitos y muy bonitos. Sobre todo el jardín que hay junto a la entrada.

También existe una playa con duchas justo al lado del castillo, un buen sitio para darte un baño si el tiempo acompaña. 

En definitiva, creo que es uno de los mejores castillos que he estado.