
DIA 2 : MONTE PERDIDO , CILINDRO , PRADERA
Valla nochecita en el refugio, justo me tiene que tocar un oso roncador al lado mio.Ni siquiera los tapones de los oídos son capaces de neutralizar semejante ronquido...
Pues nada,con los primeros rayos de luz empiezo la ascensión al Monte Perdido.
Miro...